Por: José Rodríguez

En los últimos días, nuestro estado Barinas ha sido testigo del inicio de otra contienda electoral, una más entre las múltiples experiencias políticas electorales que la colectividad barinesa ha experimentado en los últimos diez años.

El escenario político esta servido para que cada uno de los candidatos presenten a sus ciudadanos, propuestas que puedan convencer a la colectividad al momento de elegir a sus gobernantes y especialmente, a quien estará desde el Palacio del Márquez, guiando los destinos políticos de nuestra región.

No hace falta ser un sesudo analista político para concluir que la contienda por la gobernación de Barinas se centrará en dos candidatos, en Adán Chávez y Julio Cesar Reyes. El resto de los contendores son figuras de adorno que movidos por apetencias personales y grupales, en términos de la realidad político partidista, buscan ocupar cuotas de poder en las actuales circunstancias electorales.

Ahora, analicemos el porque a mi juicio, Adán Chávez será el próximo gobernador de Barinas y obtendrá el triunfo el 23 de noviembre.

La primera variable que debemos tener en cuenta, es que toda contienda político electoral, se desarrolla bajo la égida de una organización o maquinaria partidista. Sin lugar a dudas, es evidente la fortaleza que tiene el PSUV, sobre un partido político minoritario como Gente Emergente.

Mientras el PSUV esta clavado en el alma y en la esencia del pueblo Barinès, motivado a que nació de manos del Presidente Hugo Chávez y de la población, quien acudió voluntariamente a inscribirse en el mismo, Gente Emergente es un pequeño partido que comienza a tener proyección en esta contienda electoral, gracias a una estrategia mediática que desarrollan tanto Julio Cesar Reyes, como Wilmer Azuaje. Como un detalle, Gente Emergente en el estado Barinas, apoyando la candidatura del presidente Hugo Chávez en las elecciones del 2006, obtuvieron solo 658 votos, mientras que el MVR obtuvo en números absolutos la cantidad de 166.860 votos.

La segunda variable a considerar es la propuesta de gestión o el Programa de Gobierno, que cada candidato presentará a los electores barineses. Adán Chávez con toda seguridad presentará a los barineses una propuesta integral de desarrollo para nuestro estado, tomando en consideración las redes y experiencia que durante estos últimos años ha acumulado en el ejercicio de diversos cargos públicos de envergadura.

Por su parte, Julio Cesar Reyes ha dejado en evidencia múltiples debilidades en su gestión, que ha sido matizada con una buena estrategia de comunicación, llevando el mensaje al colectivo Barinès de buen gerente, pero basta caminar por las calles de Barinas para ver los huecos en la vía (responsabilidad por ley de los municipios), deficiencias en el alumbrado público, obras inconclusas como el Terminal de Pasajeros, el Mercado del Sur y El Museo de los Llanos, solo por mencionar algunas de ellas, dejando claro que, durante toda su gestión, tuvo el apoyo del gobierno regional y del gobierno del presidente Chávez, lo cual deja en evidencia precisamente no una imagen de gerente eficiente y moderno.

Un detalle de suma importancia, es que la propuesta revolucionaria que presentará Adán Chávez y que ya, en diversos espacios públicos ha venido esbozando, responde a un Plan de País, que se enmarca en las siete líneas del Proyecto Socialista Simón Bolívar, mientras que Julio Cesar Reyes, no asume una postura clara en términos de su ideología política y de sus propuestas de desarrollo para el estado, señalando en múltiples ocasiones que esta de acuerdo con las habilitantes, pero no las ha leído (lo dijo en el programa de Víctor Faneite el 13 de septiembre) o que impulsara el poder popular, sin haber el mismo transferido el poder durante su gestión como alcalde.

Un tercera variable, para no ser más extenso en el análisis, es comparar el curriculum vitae de cada candidato. La experiencia que trae Adán Chávez es inmedible en relación a la que puede haber adquirido Julio Cesar, durante sus ocho años de gestión. Adán no solo ha desempañado cargos en los niveles del alto gobierno, sino que durante su trayectoria estudiantil ha conservado incólume su militancia y los valores que lo han acompañado durante su vida, como la honestidad, la amistad y la disciplina en sus tareas.

Julio Cesar por su parte, decepcionó a la militancia chavista que lo acompañaba cuando quedó en evidencia su pestilente ambición personal anclada a los más rancios actores de la oligarquía venezolana, como Luís Miquilena. Judas Cesar como lo bautizo el pueblo, denigró del presidente que tanto apoyo le brindó, llamándolo patotero de barrio, denigrando allí también a quienes hemos nacido o vivido en barrios, como si los patoteros no tuvieron su origen en la clases pudientes de los años 60 en los Estado Unidos de América.

Por último, para los electores concientes que ejercen su derecho al voto en términos de la relación costo-beneficio, un triunfo de Adán Chávez garantizará un apoyo pleno del gobierno central y de los recursos económicos que se traduzcan en empleo, desarrollo y prosperidad para todas y todos, caso contrario sucedería con un supuesto triunfo de Julio Cesar Reyes, sin siquiera imaginar que su llave electoral para alcalde, como lo es Wilmer Azuaje, estaría amenazando a quien se atreviera a oponerse a sus designios, llegando a quemar su vivienda o bienes particulares en detrimento del medio ambiente.

El pueblo de Barinas esta conciente que el triunfo de Adán Chávez es inminente, su candidatura viene creciendo en detrimento de la candidatura de Julio Cesar Reyes. Las razones, algunas de las expuestas anteriormente, los resultados quedaran en evidencia el 23 de noviembre.